3.6.11

La foto que no se debía tomar






















Al mediodía fui testigo de un abuso de autoridad por parte de representantes de la PROFEPA. En la ciudad de Xalapa, Veracruz en el marco de una "feria" de arte y artesanías en el paseo de los lagos. Al pasar frente a un puesto de artesanías de piel y plumas exóticas observé que un pequeño grupo de personas hablaba de manera golpeada al encargado exigiendo que apresurara a guardar la mercancía en bolsas de plástico pues debían remitirlo al ministerio público federal porque, a decir de las autoridades la mercancía incurría en delitos contra la conservación del medio ambiente.

Me detuve frente al establecimiento e intenté tomar una fotografía del suceso, el policía federal con voz rabiosa prohibió el acto.
"¿por qué no puedo tomar fotos?" -dije al oficial,
"porque no se puede" - respondió.

Repliqué que el área era un espacio público y por lo tanto estaba en libertad de tomarla, que sin importar que estuvieran trabajando se encontraban dentro del mismo espacio y por lo tanto eran susceptibles de ser fotografiados. El policía federal me miró a los ojos y dijo -si tiene usted algún problema vamos a tener que hacer que nos acompañe al ministerio público federal. -Posteriormente el que supongo era quien dirigía el operativo dijo que se encontraban trabajando y por eso no debían ser fotografiados.

En fin, hablaron fuerte y amenazaron con llevarme al ministerio público si tomaba la fotografía, solo para intimidar. Dichos representantes de la PROFEPA no llevaban consigo ninguna identificación, no presentaron ninguna orden para requisar la mercancía del comerciante, no hicieron una visita previa para verificar la legalidad de la adquisición de las pieles y las plumas exóticas, solo una mujer portaba una camisa con el escudo de la dependencia y tres hombres más vestían como civiles. Los seguí hasta que me perdieron de vista y pude tomar la fotografía que ilustra esta nota (el policía y el comerciante delante de los representantes de la procuraduría)