21.6.11

Las voces de la voz (restos de nada)























Desapariciones forzadas, muertes, sangre…

No, no es la muerte, no es la sangre, no son los emblemas que con buena intención diseñan los moneros del Chamuco. Es la impotencia que un pueblo siente ante el poder represivo de un gobierno y las intimidantes acciones del “Crimen organizado” lo que perturba. Caminar por calles que claman el alto a la ocupación militar, alto a la sangre; con un pueblo que se recuesta frente a los edificios públicos y dibujan siluetas con tiza para emular una escena del crimen, “¡más poesía y menos policía!”…

Es un hecho ya la organización ciudadana en un país que se ha caracterizado por el “valemadrismo”. ¿O es un hecho que la capacidad de convocatoria de una estructura sin fines de lucro ha logrado congregar a cientos de ciudadanos por medio de las redes sociales? Lo inquietante es por qué al tercer llamado, al menos en la ciudad de Xalapa, Veracruz, asistió una cantidad menor de inconformes que en la primera caminata. ¿Dejó de ser moda para los usuarios de facebook? O simplemente para quienes las cosas requieren de praxis una marcha más estaba de más.

El lunes por la mañana fue otro periodista y su familia, ahora en el Puerto de Veracruz. Una manifestación para puntualizar la exigencia de justicia convocada por periodistas xalapeños. Más estudiantes desaparecidos, más asesinatos y más caminatas para exteriorizar el repudio que un pueblo siente por las condiciones que se viven y por su gobierno.

El activismo por el activismo no tendrá resultados. Las marchas son un buen comienzo y la organización popular es ya tangible. ¡Es momento de subir el peldaño, de dar el siguiente paso. Somos mayoría y el poder debe combatir al poder. Un levantamiento es necesario. Quien muera debe morir luchando. Hay que hacer valer la libertad y no dejarla vuelverse restos de nada!









3.6.11

La foto que no se debía tomar






















Al mediodía fui testigo de un abuso de autoridad por parte de representantes de la PROFEPA. En la ciudad de Xalapa, Veracruz en el marco de una "feria" de arte y artesanías en el paseo de los lagos. Al pasar frente a un puesto de artesanías de piel y plumas exóticas observé que un pequeño grupo de personas hablaba de manera golpeada al encargado exigiendo que apresurara a guardar la mercancía en bolsas de plástico pues debían remitirlo al ministerio público federal porque, a decir de las autoridades la mercancía incurría en delitos contra la conservación del medio ambiente.

Me detuve frente al establecimiento e intenté tomar una fotografía del suceso, el policía federal con voz rabiosa prohibió el acto.
"¿por qué no puedo tomar fotos?" -dije al oficial,
"porque no se puede" - respondió.

Repliqué que el área era un espacio público y por lo tanto estaba en libertad de tomarla, que sin importar que estuvieran trabajando se encontraban dentro del mismo espacio y por lo tanto eran susceptibles de ser fotografiados. El policía federal me miró a los ojos y dijo -si tiene usted algún problema vamos a tener que hacer que nos acompañe al ministerio público federal. -Posteriormente el que supongo era quien dirigía el operativo dijo que se encontraban trabajando y por eso no debían ser fotografiados.

En fin, hablaron fuerte y amenazaron con llevarme al ministerio público si tomaba la fotografía, solo para intimidar. Dichos representantes de la PROFEPA no llevaban consigo ninguna identificación, no presentaron ninguna orden para requisar la mercancía del comerciante, no hicieron una visita previa para verificar la legalidad de la adquisición de las pieles y las plumas exóticas, solo una mujer portaba una camisa con el escudo de la dependencia y tres hombres más vestían como civiles. Los seguí hasta que me perdieron de vista y pude tomar la fotografía que ilustra esta nota (el policía y el comerciante delante de los representantes de la procuraduría)